sábado, 2 de junio de 2012

Tercer capítulo :)

Siento no haber escrito estos días, pero con los exámenes y eso no he tenido mucho tiempo, además ayer que pensaba subir esta entrada abrieron la piscina de mi pueblo y se me paso. ;)
Pero bueno, aquí esta el siguiente capítulo, que espero que os guste, ¡un besazo!

Esa tarde, Maya y Tor me vinieron a buscar. Nos saludamos y comenzamos a caminar en silencio hacía el Salón. Cuando llegamos nos saludo el alcalde, el señor Nitrógeno:
-       Buenos días futuros trabajadores – saludó -. Hoy haremos las pruebas. Haced el favor de formar grupos de tres personas. Cada persona irá con un profesor que les explicará todo lo que deseen saber. Y además les hará las pruebas.
-       Vamos juntos, ¿no? – pregunté nerviosa mientras el alcalde seguía hablando.
-       Por supuesto – me respondieron los dos al unísono.
Nos juntamos los tres y fuimos hacía un chico de unos veinte años con cara amable.
-       Hola, soy Cadmio – nos dijo sonriente mientras nos daba dos besos y un efusivo abrazo.
-       Yo soy Tormenta, ella Arcoíris y ella Sol – nos presento Tor. Cuando acabó de hablar yo le envié una mirada furibunda. ¡Odiaba que me llamaran Arcoíris!
Cadmio nos explico lo que íbamos a hacer. Con un conjuro, que haría el alcalde, nos convertirían en medio humanos. Se nos quitarían las alas y nos volveríamos de su tamaño, ¡es decir enormes! Nos asignarían un niño o una niña, según nuestro sexo, a la que debemos cuidar durante un mes. Pos supuesto ellos no sabrían que somos hadas, solo si nosotros deseamos decírselo lo sabrán. Los chicos asignados a un mismo grupo de tres deben vivir cerca y ser amigos. También nos explicó las pruebas que haríamos. Cuando termino sonó la campana. Nos llevaron a unos vestidores y los tres nos pusimos unos trajes azules compuestos de un pantalón de chándal y una camiseta de manga corta.
Salimos de los vestidores preparados para cualquier cosa. Pero nos sorprendió encontrarnos con una gran sala con tres mesas pequeñas y una grande en la que estaba sentado Cadmio con sus brillantes alas rojas titilando de la emoción.
-       ¿Preparados?
-      
-       Sentaos, la primera prueba es una prueba de idioma. Es obvio que si vais a ir allí necesitareis saber su idioma, ¿no? Bien, poneos los cascos, os haré preguntas y debéis responderme por turnos. Primero tú, Arcoíris – explica mirándome
Nos sentamos y nos pusimos los cascos. La primera pregunta resuena en nuestras cabezas como un enorme y ruidoso relámpago: “¿Tienen los humanos alas?” ¡Esa era facilísima!
-       ¿Arcoíris?
-       Nnno, losss hummmanosss nnno tiennnen alasss.
-       Bien dicho, pero la pronunciación regular, alargas demasiado las palabras – me dijo mientras comenzaba a sonar la siguiente pregunta que iba dirigida a Tor.
Estuvimos bastante tiempo en aquella prueba mientras Cadmio apuntaba cosas en una vieja libreta color ámbar. Luego dijo:
-       Bien chicos, en esta prueba ya habéis acabado. Mañana será la próxima. Podéis descansar.
Nos despedimos de él y volvimos a casa hablando de la prueba. En general nos había salido bien, pero yo tenía muy mala pronunciación. Esperaba que eso no afectara a las puntuaciones de mis amigos.
A la mañana siguiente tenía clase, pero me la salte y rece para que mis padres no se dieran cuenta de mi falta. Si se daban cuenta me matarían, y nadie deseaba que eso ocurriera. Tor y Maya me estaban esperando debajo de mi ventana, baje y volvimos al Salón sin decir palabra, igual que el otro día.
Allí nos encontramos con Cadmio, que nos dijo que nos cambiáramos de ropa en el vestidor. Así lo hicimos y cuando salimos no nos encontramos con la sala de las cuatro mesas, sino con una enorme pista de atletismo.
-       ¡Uau! – dijo asombrada Maya
-       Vaya Sol, veo que te ha gustado la pista – respondió Cadmio acercándose a nosotros -. La prueba de hoy, como podréis imaginar, es más bien física. A mí personalmente me gusta más, pero no se a vosotros.
¡A mí no! Odiaba la educación física en clase, pero a Maya se la daba realmente bien, así que no bajaríamos muchos puntos.
Lo primero consistía en hacer una carrera con los demás grupos. Como era de esperar la ganadora fue Maya. Y eso Cadmio, como todo, lo apunto en su vieja libreta.
También hicimos una prueba de salto de altura, que la gano una chica llamada Aleluya, que era de mi clase. Y otra de salto de longitud que también gano Maya. Y si a eso le unimos los cien metros vallas donde Tor quedo segundo, no quedamos muy mal en las puntuaciones, aunque no gracias a mí.